Érase una vez un hada moderna y juguetona que amaba la vida y sonreía durante todo el tiempo. Le gustaba tanto vivir, que nunca quería descansar ni dormir ni dejar de hacer cosas. De hecho, normalmente comía mientras trabajaba en el ordenador y, aunque comiera acompañada, se levantaba masticando aún el último bocado, para seguir con sus tareas.
Hacía todo muy bien. Era más rápida y más perfecta que nadie. Nunca fallaba en sus compromisos, aunque tuviera que dedicar horas y esfuerzo a complacer a todo el mundo. Era generosa, trabajadora y se exigía mucho.
Hasta que un día, abrío los ojos con el sol, como hacía habitualmente. Pero en lugar de sentirse feliz y saltar de la cama a toda velocidad, un enorme cansancio se apoderó de su cuerpo. Además le dolían los músculos de los brazos y de las piernas, también las articulaciones. De pronto, nóto que se le había hinchado la barriga y las caderas habían crecido enormemente. Su piel estaba reseca y vio la almohada llena de pelos que se le habían caído.
No sabía qué pasaba. ¡Aquello era algo tan repentino! ¡No lo vio venir! Así que pidío ayuda a Dios y a los médicos del cielo. Y, de pronto, apareció el Hada Resplandeciente que se sentó a los pies de su cama. La miró en silencio durante un rato, con rostro sereno y ojos brillantes, hasta que finalmente le preguntó:
-¿Dispones de un fin de semana para desconectar, cuidarte y pensar un poquito en ti?
Nuestra hada no pudo más que asentir.
- Si es así, te propongo un plan que te encantará: pasar un fin de semana depurativo- continuó diciendo el Hada Resplandeciente-. Quizá debería contarte lo bien que te vendría porque estamos todos muy estresados, tenemos la cabeza en mil sitios y no nos mimamos lo que deberíamos. Y, aunque todo esto es verdad y podría darte muchas más razones para explicar ese abandono al que nos sometemos, eso ya lo sabes tú.
Así que si te parece te cuento mi propuesta, para que disfrutes de un pequeño paraíso durante 48 horas que serán como un paréntesis para conectar contigo misma.
Mira, la sensación es genial, por fin respirarás paz, será algo de energía positiva y te hará sentir maravillosamente....
Quizá creas que exagero un poco o que lo digo porque es mi propuesta, pero piensa que estas opiniones no son sólo mías, sino de las hadas que han disfrutado de los fines de semana depurativos que se organizan en el Hotel Rural La Fuente del Gato. Y todo lo que ellas han vivido lo puedes experimentar y practicar tú misma sin tener que desplazarte de casa.
Un auténtico fin de semana depurativo sirve para desconectar, descansar, reflexionar, dar paseos por la naturaleza, cuidarte y recargar las pilas, leer y hacer todo aquello que casi nunca te perrmites, pero durante ese fin de semana harás y te enriquecerá. Las sensaciones, las vivencias y todo cuanto aprenderás te servirán para toda tu vida.
Por ejemplo, vas a mejorar sin realizar esfuerzo alguno el aspecto de tu piel, que lucirá más luminosa, y te verás mejor. También disminuirás el volumen corporal, optimizando la digestión y aumentando la sensación de ligereza.
-¡Qué maravilla! ¿Y eso cómo se hace? -pregunto nuestra hada, sabiendo que aquello era precisamente lo que neccesitaba.
-Si no puedes ir al Hotel Rural La Fuente del Gato, puedes hacerlo en casa - respondió el Hada Radiante.
Se trata de dedicarte un fin de semana por completo a ti, sin hablar excesivamente, para así poder estar contigo misma. Sigue una monodieta depurativa con alimentos del todo ecológicos, en un retiro de paz, meditación silencio y descanso.
El silencio es muy importante. Para muchas personas resulta difícil no hablar. Pero debes concederte el regalo del tiempo para estar contigo misma, es la única forma en que tu cuerpo puede conectar con tu alma para sanarla. Un retiro depurativo constituye un espacio de paz y de descanso, por eso has de evitar la televisión hablar por telefono, chatear, escribir correos...
Debes pasear por la naturaleza, leer libros inspiradores, recibir un masaje, meditar, practicar yoga, pintar...
-¿Y qué es una monodieta depurativa, Hada Radiante?- preguntó nuestra hada.
-Consiste en ingerir los mismo alimentos durante todo el día: en el desayuno, a media mañana, la comida, la merienda y la cena. Por ejemplo, puedes comer sólo cerezas, o bien uvas, manzanas, piña... o únicamente una crema ligera de verduras, una sopa de algas... Yo hago la monodieta al menos cuatro veces al año, con cada cambio de estación.
Y dicho esto, el Hada Radiante ¡desapareció!
Nuestra hada siguió al pie de la letra sus consejos. Y cuando acabó el din de semana depurativo, escribió esta oración de agradecimiento:
Te doy las gracias, cuerpo, porque no aguantas que te maltrate, porque me dueles, porquee te inflamas, porque estás cansado. Gracias porque, cuando gritas hasta que te escucho y actúo en consonancia con tus peticiones, me concetas con mi alma y puedo escuchar los mensajes que antes no podía oír. Y me reecuerdan para qué estoy en este mundo. Y me marcan el camino a seguir. Y me muestran quién soy, cuál es mi misión y cómo desarrollarla. Gracias, amado cuerpo, vehículo de la paz y del servicio, templo de mi ser. Gracias por tu autoridad sin rencor. Me comprometo a respetarte y a amarte como tú lo haces conmigo. Juntos como amigos para el bien, la serenidad y la paz.
Ana Moreno
Quizas
